La indignación y el enojo frente a la desidia y la ausencia de funcionarios macristas eran los sentimientos generalizados entre los habitantes del barrio. “¡Que se vaya Macri!”, gritó indignado un hombre. Este pensamiento expresa un dato real: el jefe de Gobierno encabeza las encuestas de rechazo entre los posibles candidatos a la presidencia, con un 29,9 por ciento de personas que no lo votaría. Pero para dar la pelea y ganar la ciudad, “hay que militar puerta a puerta”, como decía Néstor Kirchner; y hoy, esas palabras cobran más transcendencia que nunca y los compañeros las plasman en los hechos. Su trabajo territorial es constante y está lejos de las cámaras de televisión y de las mentiras dictadas por el asesor de imagen de Mauricio, Jaime Durán Barba, quien le inventa anécdotas con el protagonismo reiterativo de personajes (pseudovecinos) de “Cacho” y “Orlando”.
Ante la improvisación en la gestión y la política marketinera del gobierno porteño, los militantes se ocuparon de explicitar las políticas del gobierno nacional implementadas por Néstor y Cristina que han hecho de esta Argentina un país mejor: Asignación Universal por Hijo, Fútbol para Todos, construcción de viviendas, escuelas y hospitales, reindustrialización, paritarias, Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, entre muchas otras de una larga lista.A pesar de ser señalada como una comuna reacia al proyecto nacional y a Cristina, gran cantidad de vecinos alentaron por el gobierno y por la militancia juvenil comprometida. “El 11 vamos todos a Huracán”, se entusiasmó un hombre que se acercó a hablar apenas vio las banderas de La Cámpora colgadas en las esquinas.
Hoy más que nunca, es hora de recuperar la ciudad y sumarla al proyecto nacional con el candidato de Cristina. Es sabido que no hay que pelearse con la realidad sino transformarla.
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